Editorial
No sólo de caducidad
se habla
En la mañana de hoy aparece un documento firmado por dirigentes y militantes del Frente Amplio que argumentan su rechazo a la propuesta trasladada por José Mujica y Danilo Astori a la bancada de diputados del Frente Amplio pidiendo que se retire, que no se vote el proyecto sobre la Ley d e Caducidad que cuenta con media sanción del Parlamento. El tema – se informa – ha sido explicitado por el Presidente en una carta que envío a Jorge Brovetto, la que será analizada en el reunión de la Mesa Política que comienza a las 3 de la tarde de hoy.-
Menos trascendencia mediática ha tenido el pronunciamiento del Secretariado Ejecutivo del PIT CNT que en una declaración emitida el pasado jueves que en su último punto afirma: “….seguimos apostando a que los representantes elegidos por nuestro pueblo asuman el rol que les fue delegado y aprueben el próximo 19 de mayo la Ley que repara en parte los daños ocasionados al libre ejercicio de la Justicia”.
A buen entendedor esto significa que existe posibilidad de que el Frente Amplio se vea enfrentado con los sindicatos y la central obrera en este asunto. El PIT CNT, por otro lado, ratificó su decisión de llevar adelante un paro general parcial con manifestación y acto el mismo 19 de mayo.
La dirección mayoritaria del Frente Amplio se encuentra enfrentada a sí misma cuando las corrientes que responden, tanto al presidente como el vicepresidente de la República – acompañados por Tabaré Vázquez – adoptan la posición de sus referentes políticos y se aprontan a proponer hoy la realización de un Plenario nacional para el próximo fin de semana, procurando variar la anterior decisión, asunto que requerirá atar acuerdos porque aquellas decisiones vienen adoptadas por la unanimidad del PN.
El pasado 1º de mayo en el acto en Las Piedras la central obrera – que realizará su Congreso en el próximo invierno – afirmó entre otras propuestas: “Es necesario refundar y fortalecer el Estado como locomotora del desarrollo nacional, de la producción de riqueza, de la industrialización genuina, junto a los países de América Latina.
Encontrarán en la clase obrera un aliado de fierro para una distribución mas justa de la riqueza…. Frente a la testaruda negación de las cámaras empresariales que denuncian en forma revanchista al Uruguay ante organismos internacionales por reconocer derechos laborales… cuando Gobiernos y parlamentarios de izquierda aprobaron leyes – en el anterior período - que reconocieron derechos laborales y sindicales a los trabajadores organizados mediante iniciativas que no aprobaron anteriores Gobiernos.
La central obrera también afirmó: “El centro de nuestro planteo es la necesidad de impulsar en el Uruguay un cambio dentro del cambio para seguir avanzando. Un cambio de raíz para construir una sociedad mas justa, más solidaria, más nuestra. Tenemos que seguir trabajando para extirpar del aparato del estado todo vestigio de las clases dominantes, profundizar la democracia, corregir errores e ir a fondo en la aplicación del programa de cambios comprometido.
En nombre de la Central de trabajadores el último orador de la jornada del 1º de mayo en el Club Juventud de Las Piedras Juan Castillo afirmó: “Con la actual matriz productiva no es posible avanzar hacia una distribución equitativa de la riqueza nacional ni tampoco avanzar hacia una democracia más profunda y participativa cuando la economía nacional crece en ancas de dos factores: los precios internacionales de las materias primas y los flujos de inversión extranjera lo que da lugar a un modelo económico concentrado, centralizo, trasnacional. Y agregó: “los principales segmentos de la economía no están en manos nacionales cuando las bocas de salida de las cadenas productivas: industria frigorífica, complejo forestal maderero y pulpero, sojero, arrocero y otros pertenecen a empresas trasnacionales. Se necesitan cambios macroeconómicos para aplicar un programa nacional, popular, democrático. Los uruguayos necesitamos empresas públicas. Estamos de acuerdo con inversiones productivas, científicas, tecnológicas externas, pero es el estado que puede, que debe invertir, sin relegar su función. Empresas públicas bajo control, en manos del Estado nacional. El Pit Cnt tiene reservas con el proyecto del Gobierno que habilita la participación público – privada en grandes obras de infraestructura. Tenemos propuestas y queremos intervenir en el debate y la decisión para que el parlamento debata y apruebe un buen instrumento y no un arma de doble filo, inversiones extranjeras que terminen controlando áreas hoy estratégicas para el Estado.
Sobre el final de la lectura del documento de la central obrera se afirma: “Somos críticos de la actual política económica, de las limitaciones de la estrategia de crecimiento con desarrollo que sigue ele Gobierno nacional. Existen más uruguayos en puestos de trabajo pero estas condiciones laborales y salariales distan de ser dignas. El país está mejor que antes pero el 20 % de los estratos más ricos de la sociedad se apoderan del 50 % de la riqueza producida en tanto el 20 % más pobre debe sobrevivir con el 5 %”. ¿Por qué tantas exoneraciones tributarias e impositivas para inversores extranjeros? Nos preguntamos porque los uruguayos tienen que pagar religiosamente sus impuestos so pena de multas, moras y recargos, mientras que los que mas han crecido, más han ganado, están exonerados de pagarlos, porqué los trabajadores pagamos tantos impuestos sólo por trabajar” añadió el documento.
Poco y nada de este análisis tuvo espacio en la intervención que hizo Fernando Pereira junto a una dirigente del la Secretaría de la Mujer por cadena de radio y TV la misma noche del 1º de mayo. Una importante oportunidad perdida cuando se utilizó casi la totalidad del tiempo para repasar logros y conquistas de los últimos años sin mención siquiera a las grandes líneas del programa y los objetivos de la central obrera. Una especie de división de la representación que cerró el 1º de mayo con dos discursos si bien no antagónicos entre sí, si confrontados en sus objetivos.
La intervención leída por Juan Castillo se apoya claramente en decisiones adoptadas por el conjunto de los sindicatos, apuntando a una transformación económica, política y social del país, a un nuevo tipo d e Estado, un estado de transición a una nueva sociedad, un estado revolucionario. El documento del PITCNT resulta claramente confrontativo con el modelo que se pergeña desde el Poder Ejecutivo, que desconoce el mismo programa resuelto por el V º Congreso Zelmar Michelini.
Creemos que el PIT CNT en su Congreso o cuando lo resuelve, debe intervenir en la dilucidación que tiene entre manos el FA para la convocatoria de una ANC. Las propuestas del PIT CNT de transformaciones estructurales encontrarían en la ANC una vía excepcional para concretarse. La central de trabajadores – creemos – debe apoyarse decididamente en las extendidas bases sociales organizadas o a organizar para que sus corrientes mas audaces, revolucionarias, no permanezcan mediatizadas – como lo estuvieron el 1º de mayo – por dirigentes y sectores que aceptan y conforman con su buen pasar, conservadorismo y adaptación al línea general del Gobierno.-
Claramente la central obrera deberá adoptar una política, una estrategia de la que hoy carece para impulsar el programa resuelto. El programa sin política se torna un instrumento pasivo, sólo recordable en los grandes acontecimientos – como el 1 º de mayo – y sólo por algunos dirigentes mientras otros desperdician a conciencia la oportunidad de trasladar a la población toda una intervención coherente con las decisiones adoptadas.-
Los asuntos a dilucidar no se cierran con las decisiones sobre la Ley de caducidad que se adopten por estos días. El centro de las decisiones, las diferencias y la disputa política y social está en este otro lado, aunque algunos remen para ocultarlo.-
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