Editorial
Sin transformaciones estructurales,
6 resultará similar al 4.5 %
En estos días, a raíz de distintas movilizaciones realizadas por los gremios de la educación se viene a la mente esta pregunta. ¿Cual es su significado?
Desde siempre se ha reivindicado el 6 % del PBI para la Educación Pública. Hoy, en el marco de la crisis actual del sistema, en concreto de crisis financiera constante, cualquiera se puede dar cuenta que la pobreza, la exclusión, las cárceles, falta de vivienda digna, es decir, la mayoría de los males de nuestra nación, los sufren de forma preponderante, los mas jóvenes. Nada diferente a la condiciones de siempre, pero en el marco del mayor proceso de concentración económica y tecnológica de la historia.
Si lo abordamos desde el punto de vista del sistema capitalista, es una forma de discusión de la asignación de recursos, muy fácilmente, sobre todo desde los agoreros y beneficiarios del sistema, decir no se puede.
Veamos que otra forma, sin entrar en discutir los beneficios de una mayor asignación de recursos a la educación, reorientar menguados recursos de Estado puede resultar difícil y hasta contradictoria. No se puede brindar buena Educación, en un contexto de crisis sanitaria, por ejemplo.
Ahora ¿si utilizamos para equiparar recursos a las necesidades, cuantiosas reservas nominadas por el país en una moneda, el dólar, y modelo, el capitalista, en crisis? ¿Por que no asignamos impuestos específicos, como retenciones a toda forma de extracción de recursos naturales sin transformación industrial?
Sin ser soberbios pensemos, veamos, que opciones hay. Que los sindicatos que se movilizan tomen iniciativas, eleven propuestas y programa, por ejemplo, apoyados en resoluciones de los últimos Congresos de la Central Obrera, el PIT CNT, que los sindicatos de la educación integran.
6 % es distinto a 4.5, % evidentemente. Pero la verdadera discusión es que si no se impulsan y llevan adelante transformaciones fruto de una nueva concepción de la Educación, hacia el socialismo, si la reforma política - vía una nueva Constitución de la República, convocando a una Constituyente revolucionaria, muy probablemente, sin caer en una contradicción matemática, 6 resultará igual a 4,5.-
Editorial
Las viejas FF AA están muertas. Resulta urgente, enterrarlas.
Los mandos militares, la estructura militar, tienen un criterio particular del honor. El Comandante de la Armada – por ejemplo – renunció porque un sobrino fue procesado por expropiar recursos públicos en su provecho. Es decir, robar al Estado, robar a la nación, quitarle recursos al Estado.
Sin embargo, hasta ayer, mantenía el Comando de una fuerza donde verdaderos nidos de delincuentes comunes hacía su agosto en julio mientras los Comandantes en actos oficiales reclamaban recursos al Poder Ejecutivo recursos, nuevos armamentos e instalaciones, sobre todo utilizando como argumento el estado de pobreza e indigencia – real, por otro lado – de la mayoría de los soldados.-
La población en su mayoría – creemos – que viene mirando de reojo, midiendo todas y cada uno de los pasos del Gobierno que encabeza José Mujica, ve con satisfacción y cierto grado de previsible comprobación histórica que las actuales no son, si es que se necesitan, las FF AA que el Uruguay precisaba y necesita para consolidar un proceso soberano en la construcción de una nueva sociedad. Porque de esto se trata.
Con todo, lo pero que han hecho las FF AA no ha sido esta expropiación despiadada de recursos públicos en beneficio de catervas de ladrones instalados en los altos mandos. Los Comandantes, los que permanecen, los que se van por voluntad propia, los que fueron relevados o los que cumplieron su ciclo, deberán ser investigados.
La sociedad se pregunta ¿qué otra gran tarea tenían los Comandantes que no controlaban el destino de recursos que públicamente denuncian como insuficientes? ¿Cómo puede suceder sino es por complicidad o desidia, que los controladores financieras permanecieran por décadas en sus puestos, llevando contabilidades paralelas? ¿Cómo puede suceder que un Comandante acepte realizar compras de instrumentos por más de medio millón de dólares, que resultaban ficticias?
Es la estructura militar en su conjunto la que está en cuestión cuando desde los sindicatos y el PIT CNT se planteó la eliminación de la Ley de Caducidad. Las FF AA se hundieron, estas FF AA, en la peor, la más grave de las ignominias, cuando obraron como fuerzas de ocupación del país en representación de la oligarquía y el imperialismo. Estas no son palabras huecas. El crimen, las sevicias, la violación, desapariciones y crímenes le son imputables a un organismo que debe ser removido de pies a cabeza.
Más de 25 años después de la caída y abandono del poder, perduró dentro de ellas la expropiación de recursos públicos – siempre insuficiente para alimentar, sanar o educar – en beneficio de los mandos, de la oficialidad. Los mismos mandos y la misma oficialidad que, muchos de ellos, se abroquela en los llamados Centros Militares en defensa de cómo obraron antes y cómo obran ahora las FF AA.
Los señoritos que reclaman bajar la imputabilidad a los menores, los medios de difusión que realizan campañas políticas utilizando como recuso la seguridad pública, los que en Maldonado - incluso dirigentes del Frente Amplio – que se movilizan contra una acotad ampliación de la cárcel de Las Rosas, deberán ser convocados a analizar lo gravoso que resulta para la sociedad uruguaya el delito de cuello blanco, en este caso, de cuello militar.
Los sindicatos, la Central obrera, la Universidad de la República, la FEUU, las organizaciones sociales, los partidos obreros, el Frente Amplio, deben, debemos encarar a fondo la discusión y elaboración de propósitos y propuestas para avanzar en la liquidación absoluta de todo organismo, sean FF AA o Policiales, organizadas en función de la defensa del sistema de propiedad y explotación capitalista. Aquí está la madre del borrego.
Los discursos del honor han sido siempre dialéctica vacía, viciada desde su origen por una función que involucra a dignos con indignos, donde los mandos - al igual, exactamente, que en dictadura – el mando lo ejercen los menos dignos, los criminales, los ladrones del erario público que la sociedad trabajadora construye día a día.-
El Ministro Luis Rosadilla está recibiendo el apoyo desde todas las fronteras. Creemos que no debe correr a informar a los PP TT de cada decisión, como se ha hecho hábito en el Gobierno nacional, sino debatir con el FA, con los sindicatos, con las fuerzas reales de sostén del Gobierno, un proceso de liquidación de las viejas FF AA, creadas, patrocinadas, dirigidas en la extensa historia de la nación por el Partido Colorado, en mayor medida, y el Partido Nacional.
La burguesía, que cuando las necesitó, las usó para criminalizar a un país, es el real germen de la función antisocial acometida cuando – por ejemplo – alquilan como mercenarios internacionales funciones en el mundo. Claro que los recursos arribados iban en escasa medida para el soldado o sub oficial que procuraba una extra para construir su casa, sino que se derivaba a las arcas de estos señores de la guerra. Guerra que ellos nunca, jamás, practicaron contra los enemigos imperialistas sino, como mandos ejecutores, contra la sociedad que integraban, a la que no sólo expropiaron sus derechos, incluido el de la seguridad y la vida, sino recursos que se niegan a los trabajadores, a sus hijos, en un país donde alrededor del 40 % de los niños que nacen lo hacen en condición de pobreza.-
Programa emitido por C X 4º “Fénix” de Montevideo el miércoles 11 de agosto del 2O1O a las 8.45 AM. Partido Obrero Revolucionario
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