EGIPTO
“Rebelión de fuerzas sociales y productivas barren con conservador mesianismo religioso que se sumó al ataque imperialista contra Siria”
León Cristalli 2, Julio, 2O13
Los
sucesos de Egipto expresan la profundidad revolucionaria,
socialista en la estructura del curso social, tanto como en Brasil,
y por extensión, en el mundo. Por eso connotados periodistas
comienzan a escribir sobre la V ª Internacional.
No es un tema más, sino una necesidad que fue planteada en
forma explícita por J. Posadas 45 años atrás. Si la
organización de la nueva Internacional comunista no pudo
concretarse, en parte, se debió a la política combinada de la
burocracia soviética. También al papel no revolucionario de la
mayoría de las direcciones de los PPCC, PPS S y sindicalistas del
mundo. El querido camarada Hugo Chávez levantó las banderas
organizativas de una “V ª Internacional”, saboteada, ignorada,
o directamente enfrentada por direcciones “de izquierda”
que cuentan con medios y poder de organización. Era, es, una
necesidad del curso organizativo armónico de la historia de la
civilización. Exige objetividad, pureza, moral, política socialista
programática mundial, para reconstruir la sociedad universal.
Estos propósitos chocan contra apetitos, intereses y ambiciones
de los que se sostienen en el individualismo feroz del capitalismo.
Ahora,
sincerada la nueva etapa de la humanidad, no es posible
jugar el mismo nefasto papel: algunos ex dirigentes se fueron al
capitalismo. Los mejores vinieron - o están viniendo -, al campo
del marxismo revolucionario. J. Posadas no es solo una referencia,
sino una estructura de clase histórica en la lucha por el
socialismo. Dice el cantautor revolucionario español aragonés José
Antonio Labordeta: “la historia es inclemente con el hombre”.
En la Rusia actual, es la base soviética, leninista, bolchevique,
la que aflora en su accionar. Existen quienes intentan tapar el sol
de las ideas, vaciar el mar de los contenidos de la lucha de clases,
con la cucharita de mentecatos intereses.
En
Egipto lo que se está desenvolviendo es la II ª fase de la
rebelión de las
fuerzas sociales y productivas que están barriendo con el
mesianismo religioso, conservador, reaccionario, el mismo que se sumó
al ataque imperialista contra Siria, Hamas, Hezbollah, los
palestinos, y también contra Irán. Siempre en nombre (que no
quiere decir toda o única representación social) de los “Hermanos
musulmanes”. Son las mismas direcciones que complotaron contra
Gamal A. Nasser (1)
antes. El mismo
G. A. Nasser que aparece vivo en la función que van desenvolviendo
las FF AA en Egipto. El Nasser que con Juan D. Perón y Joseph
Broz Tito, de Yugoslavia, crearon - junto a otros líderes del
mundo -, lo que sería la lucha de los pueblos explotados- no
sometidos- el Movimiento de los No Alineados (Noal), por el imperio
capitalista y la acción conciliadora de la burocracia de la URSS y
los EEOO.
No
somos mesiánicos; tampoco optimistas banales, si materialistas
dialécticos: comprendemos, podemos prever, luchamos para
intervenir, aprendiendo, del curso.
El
dirigente
egipcio Gamal Abdel Nasser (1918-1970)
Cuando
el actual Presidente egipcio, el islamista
Mohamed Mursi, salio contra Siria, se alió a la Otan,
a todo el imperialismo, nada tiene de musulmán, menos aún
de hermano de los musulmanes. Es, en cambio, un agente de
la gran burguesía egipcia que entiende de le escapa de las manos
el curso político y social de Egipto.
Proceso
que intentaron controlar en base a una religiosidad no política,
sometida al interés global del sistema capitalista. Por otro
lado, las FFAA egipcias, son las mismas que dejaron pasar a barcos
iraníes en pleno conflicto por el Canal de Suez, hace pocos años.
Ojo al tambor!, diría el querido compañero Hugo
Chávez.
El
curso social revolucionario vuelve, luego de decenas de años atrás,
cuando se hizo la Federación Socialista de Repúblicas Árabes
Unida, entre Libia, Siria y Egipto. En la invasión y guerra en el
Canal de Suez los imperialismos Inglés, francés y yanqui fueron
detenidos y expulsados por la URSS. También cuando en la Guerra de
los 7 días (1967).
Israel, contra el progreso socialista, nacionalista revolucionario de
la población árabe, musulmana, para imponer una derrota militar,
contó a con la complicidad de la gran burguesía egipcia, sus
lacayos en la Fuerza Área, los que dejaron abiertas las puertas a
la destrucción de sus bases militares, perdiéndose en tierra
centenares de aviones egipcios. Posteriormente, la gran oligarquía
feudal saudí, asesinó a Gamal Abdel Nasser. Todo con un manto
que intentó ocultar el criminal sabotaje contra el proceso
nacionalista revolucionario, curso de rebelión de las masas en
Egipto que vuelve a manifestarse ahora.
Al
igual que en Brasil, Chile, Venezuela, Argentina, o Rusia - de
base social soviética -, el curso aparece dinámico, con fuerza y
luminosidad intensa, aunque permanece todavía sin dirección
orgánica, clara, en ideas, con confianza. La “rebelión de las
fuerzas productivas” va de la mano con la lucha de clases en esta
etapa de la historia. En Egipto se ha entrado en una II ª Fase,
reiteramos, de la rebelión social. La juventud tiene un papel
central, tanto como en España, Grecia, Francia, etcétera, porque
asume la responsabilidad de formar parte, colocarse a la cabeza de
la nueva sociedad en construcción en la conciencia de la mayoría
aplastante de la humanidad.
La
hegemonía de la burguesía imperialista, como cabeza del sistema,
se ha roto. Vivimos una etapa de transición en lo económico, tanto
como en el papel revolucionario de los nuevos Estado Democráticos.
Democracia social que viene jugando un papel central en
esta lucha del pueblo Egipcio.
Sea
cual sea, en lo inmediato, el desenvolvimiento de los
acontecimientos, Egipto ya ha ingresado en la etapa en que la
rebelión de las fuerzas sociales y productivas están barriendo
con el conservador mesianismo religioso, sumado al ataque
imperialista contra Siria.
León
Cristalli
Director de la
revista Internacional “Conclusiones”.
2 de
julio de 2013
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